martes, 12 de marzo de 2013

La Sombra.

Puedes recordar los primeros nombres, los primeros gritos, las primeras miradas interrogantes; pero cuando llevas tanto tiempo en esto, todo se va olvidando, te acostumbras, ni si quiera haces preguntas, sólo aceptas el dinero y te largas con una misión y un objetivo claro.
Me pregunto si algún día sabré lo que es aquello a lo que se le conoce como conciencia, arrepentimiento. Me temo que no, que mi maestro me arrancó esa cualidad, o debilidad, según se mire.
Me estoy acostumbrando demasiado a esto, la verdad, no me interesa mucho eso de sentar la cabeza, tener hijos y un marido al que cuidar, por favor, eso no va conmigo. Pero a veces no puedo evitar preguntarme cómo sería, un buen trago, un buen polvo y se me pasa.
Hoy he matado a alguien que no estaba en mi lista, se trataba de un niño, poca cosa, un simple toque, muy fácil, pero no se encontraba en mi lista. No importa, soy la sombra, nadie conoce mi rostro, nadie conoce mi identidad, y ese niño había visto demasiado, culpa de la madre por haberlo dejado salir o no haberlo vigilado bien.
Me he cruzado con él de nuevo, parece una buena persona, demasiado buena persona, es un clérigo, me ha dicho que me pase mañana, oh, lo haré, me reiré un rato de sus burdas creencias y de sus intentos en vano por cambiarme, quizá me lo folle, o lo viole con algo de viagra y me ría en su cara de su ''voto de castidad'' o quizá lo mate mientras le digo que dónde se encuentra Dios, no lo sé, y me la trae al pairo lo que suceda, pero admito que es la primera persona que consigue obsesionarme.
Bueno, una vez desahogada y lista para dormir, a quemar esto se ha dicho, quien lo leyera podría pensar que soy débil y todo.

Atte: Nefiro.

martes, 5 de marzo de 2013

Yeah.

Escucho a todo aquel que quiere aunque lo oculte ser escuchado, soy el apoyo de todos a los que puedo dárselo, la confesora de muchos secretos,  protectora de muchos, amiga de todo el que lo necesita y enemiga de muchos otros.
Pero ¿quién me escucha? ¿Quién hace de apoyo? ¿Quién es mi confesor? ¿Quién mi protector? ¿Quién mi amigo?
Recibo muy poco comparado con lo que doy, y me encanta que así sea.

Atte.. Kadia López.